viernes, 6 de marzo de 2009

Cuarto dia en Berlin

Lo que voy a contar a continuacion no tiene gracia. Ayer, cuando bajabamos a la Alexanderplatz en metro, una revisora vestida de paisano nos pidio los billetes.
Le llegamos a presentar hasta cuatro razones distintas por las que no los teniamos: que no entendiamos la maquina expendedora de billetes, que solo nos ibamos a desplazar dos paradas, que llegamos al anden justo cuando se iba el tren, y que en nuestro pais el billete se le compra al revisor. La revisora respondio a estas excusas con un laconico "No ticket, big problem".
Nos obligo a bajarnos del vagon y nos tomo algunos datos. Nos dejo el papelito con la multa. Ibamos a preguntarle si valia como billete para el resto del dia, pero decidimos dejarnos de cachondeito.

Bueno, aparcare este tema. Como dije, ayer fue el dia de los museos. En primer lugar fuimos - andando, por supuesto - al museo sobre el exterminio nazi que hay bajo el memorial al holocausto judio. Fue muy impactante, y a veces hasta se me saltaron las lagrimas. Luego me acerque a ver un discreto y precioso monumento en memoria a los homosexuales asesinados por el regimen nazi. Despues fuimos a una exposicion llamada La Topografia del Terror, que ocupa el lugar donde estaban las sedes de las SS y la Gestapo, y que cuenta el sistema de persecucion y terrorismo del regimen. Escalofriante.

- YO, AL FONDO, EN EL MEMORIAL A LOS JUDIOS -

Hastiados de tanta violencia y muerte, decidimos dejar por hoy las exposiciones. Comimos un kebab, y nos acercamos a la Isla de los Museos, que es un islote en pleno centro que esta atestado de museos. Queriamos ver el busto de Nefertiti, pero el museo estaba cerrado. El grupo se dividio. Yo me fui a dar un paseo a la orilla del rio, por algunos edificios espectaculares que hay cerca del parlamento, y acabe en la cupula del Reichstag viendo toda la ciudad a mis pies, toda iluminada porque era de noche. Como es de cristal, debajo se ve el hemiciclo; y habia un debate politico o algo.
Me reuni con los demas, nos dimos otra caminata impresionante para ir a cenar a una pizzeria; y volvimos al hotel, exhaustos.

No hay comentarios: